Dos ruedas bastan y sobran

Foto en Five Sisters Art Café, Brisbane

Lo mío con las bicis viene de lejos. Y eso que soy muy torpe, cuando hay cuestas demasiado empinadas me bajo y ni siquiera sé como hinchar las ruedas. Los mejores Reyes de mi infancia fueron los que me trajeron una bici rosa con pegatinas de colores, y algo de eso ha debido perdurar en mi corazón, porque aunque no he vuelto a montar hasta 15 años después, siento algo especial cuando vuelvo a ella. La mía es una mountain bike gris, normal y corriente pero desde hace unas semanas tengo obsesión por las Electra. Me encantan, me fascinan, me iría con ellas al otro lado del mundo.

Pupo, toma nota.

Electra en New Farm Bikes (Brisbane)

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